Saludos,
A través de esta lineas, quiero poner en conocimiento de los revolucionarios y fuerzas patrióticas venezolanas, los hechos ocurridos el día domingo 12 de julio, que dieron como resultado mi detención y posterior liberación.
Como los que me conocen bien saben, que me he dedicado a defender el derecho de los campesinos y comuneros.
Específicamente, existe el caso de los 6 comuneros y 3 comuneras detenidos e imputados por “traición a Patria” por el simple hecho de intentar construir el Estado comunal.
Si bien este año los comuneros y comuneras fueron “liberados”, todavía pesa sobre ellos la obligación de presentarse regularmente ante tribunales. Aún cuando un juez considera que no hay elementos para proseguir.
Como militante revolucionario de Patria Para Todos (PPT), y como actor en esta lucha por la liberación de los camaradas, me dirigí hacia Barinas para realizar en conjunto un balance de estos años y para rearticular las fuerzas en conjunto con los compañeros. Para mi sorpresa, el día domingo cuando regresaba a Caracas fuí detenido en Ospino, estado Portuguesa, bajo una supuesta orden de captura.
Si me tuviese que declarar culpable de algo, es de luchar por el respeto a los derechos de las mayorías y por exigir el respeto al debido proceso de los innumerables trabajadores, campesinos y comuneros presos injustamente. Sólo de ese soy culpable ante el Estado burgués.
Sin embargo, la orden de captura se vinculaba con el caso de los 9 comuneros de Barinas, cuasa asombro ya que yo estoy en reuniones en la Fiscalía General de República, con una mesa de trabajo instalada desde Noviembre 2019 entre la Plataforma Unitaria por los Derechos del Pueblo Trabajador y la Vice-Fiscalía General de la República, para tratar los casos de trabajadores, campesinos, comuneros, sometidos a procesos
judiciales. En este sentido, he acudido a múltiples reuniones en la sede del Ministerio Público y jamás fui
informado de la existencia de causa alguna en mi contra.
Como hemos denunciado en varias oportunidades y manifestaciones, el gobierno venezolano viene judicializando las luchas populares, lo que no es sino la consecuencia de haber abandonado el camino de las reformas progresistas, para avanzar en la aplicación de un ajuste burgués que descarga el peso de la crisis sobre el pueblo humilde. Se trata de resolver las contradicciones generadas por sus propias políticas económicas a punta de la criminalización de quienes protestan.
En esta situación, la presión inmediata de la izquierda nacional e internacional fue clave para dar a conocer la injusticia sobre mi persona y propiciar mi pronta liberación. Quedando demostrado que sólo el pueblo salva al pueblo, y que unidos podemos parar los atropellos del Estado Burgués.
Son muchas las personas a las que debo mencionar por su actuación con celeridad, eficacia y calidad revolucionaria, entre ellas a todos mis camaradas del PPT, a la juventud de la JPP, a nuestro Secretario General Rafael Uzcategui, a la camarada Beatriz Barraez y José Riera, dirigentes del partido en Portuguesa, a los compañeros de la Corriente Marxista Internacional (quienes al enterarse activaron una campaña internacional de solidaridad), FNLCT, Plataforma Unitaria por los Derechos del Pueblo Trabajador y a las demás organizaciones e individualidades que participaron de esta campaña. A todos ustedes les digo que sigo en pie de lucha, que esta acción más que atemorizarme, me llena de convicción de que estamos transitando el camino correcto, que es el camino de la lucha.
No nos vamos a rendir hasta que sean liberados todos los trabajadores y campesinos presos, hasta que se haga justicia en cada caso de desalojo y de asesinatos de campesinos.
¡Vamos a luchar y vamos a vencer!
¡Obreros, campesino y comuneros unidos!
Construyamos una alternativa revolucionaria para dar salida a la crisis del capitalismo