El domingo 6 de julio se celebró en Cachemira el congreso regional de The Struggle,
Corriente Marxista Internacional en Pakistán, la reunión se hizo en
Rawalakot, en el distrito Poonch de Azad Cachemira. Asistieron más de
1.000 personas entre delegados, militantes y contacto cercanos.
Desde un punto de vista logístico fue uno de los congresos más difíciles para asistir. Llovía mucho y eso siempre provoca desprendimiento de tierras que bloquean las carreteras, que siempre se encuentran en unas condiciones terribles. Aparte de eso, los compañeros se aburrieron de la intensa lluvia y muchos compañeros tuvieron que hacer el camino a lo largo de carreteras enlodadas, caminando varios kilómetros, vinieron de todas las ciudades, pueblos y aldeas de cada uno de los distritos de la Cachemira pakistaní. Otro problema es la extrema pobreza en la que se ven obligados a vivir la mayoría de los compañeros jóvenes. Varios no pudieron asistir al congreso porque no tenían dinero para el autobús y la asistencia al congreso.
Durante toda la noche llegaron a la ciudad vehículos y motocicletas con banderas rojas y coreando consignas revolucionarias. A las 10 de la mañana, 907 compañeros ya se habían registrado y recogido sus credenciales para asistir al congreso. Más compañeros llegaron después, desde las zonas lejanas de ese terreno difícil que son las colinas del Himalaya.
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| Lal Khan |
El congreso fue presentado por el compañero Adil Khan, presidente del JKNSF (Frente Estudiantil Nacional Cachemiro Jammu), la mayor organización estudiantil de Cachemira. Es una organización de izquierdas tradicional de los estudiantes y jóvenes cachemiros. El congreso empezó con poemas revolucionarios recitados por el compañero Amjad Shehswar, que entusiasmó a todo el congreso.
La primera sesión trató de la situación mundial y las perspectivas regionales, la sesión estuvo moderada por el compañero Amjal y la introducción corrió a cargo de Lal Khan, que llegó de Lahore como principal orador de este congreso. Dio un análisis detallado de la economía mundial, las razones de la crisis del petróleo, la situación de las guerras y la crisis del imperialismo, las desoladoras perspectivas actuales para la economía mundial y las razones de los ataques violentos lanzados contra las masas explotadas por el recién instalado gobierno de coalición "democrático" encabezado por el PPP en Pakistán.
Explicó cómo el relámpago del movimiento de las masas tras el asesinato de Benazir Bhutto fue traicionado y exterminado por la dirección derechista del PPP. Señaló que debido a la agravación de la crisis del capitalismo pakistaní, en sus primeros cien días esta coalición de derechas había aumentado los precios un 45 por ciento, todo un récord incluso para Pakistán. Demostró la hipocresía de la clase dominante pakistaní que presuntamente "apoya" la liberación de Cachemira mientras las masas bajo su control sufren la miseria e indigencia atroces.
Lal Khan explicó detalladamente cómo la clase dominante pakistaní e
india han utilizado y abusado de la "cuestión cachemira" para su propio
consumo interno y habían condenado a las clases trabajadoras cachemiras
a un sufrimiento terrible. Todos los distintos sistemas políticos
burgueses habían fracasado en Pakistán, además señaló cómo cada vez
estaba más claro en la conciencia de las masas que la única salida de
este horror es la revolución socialista.
Todos los compañeros que intervinieron en la discusión demostraron un elevado nivel político en sus intervenciones, su profundo análisis y perspectivas marxistas, todos estaban llenos de fervor revolucionario. El primer orador fue el compañero Shujaat Kazmi, un líder juvenil y sindical de masas de Muzafferabad, la capital de la Cachemira pakistaní. Después siguió el compañero Shoaib Shaam, sus apasionados discursos son famosos en toda Cachemira y es una delicia para los jóvenes cachemiros escucharle. Después llegó el compañero Javed Chaudhry, dirigente marxista del PPP de Cachemira que atacó la política procapitalista del régimen actual y defendió la revolución socialista como la única solución a los problemas acuciantes de las masas, como la única manera de conseguir la verdadera liberación nacional de Cachemira.
La intervención más espectacular fue la de Rehana, una compañera de 17 años de Khai Gala. Su intervención estaba llena de fervor revolucionario y revelaba una comprensión marxista avanzada de la situación, emocionó a todo el congreso. Hubo otros oradores, uno tras otro mostraron que la corriente en Cachemira no sólo ha conseguido un crecimiento cuantitativo, sino también un desarrollo cualitativo desde el punto de vista de la comprensión teórica del marxismo. Hubo 143 preguntas por escrito enviadas a la mesa para que el compañero Lal Khan las respondiera en su respuesta al congreso. Algunas de ellas eran dudas críticas sobre nuestro trabajo en el PPP.
La segunda sesión fue sobre organización y estuvo moderada por el compañero Shahbaz, otro joven cuadro de Cachemira. El compañero S. N. Shorida trató los principales aspectos de la construcción de la organización. Destacó la importancia del congreso y explicó cómo la organización había pasado de 35 compañeros en 2001 a los 572 actuales. Dijo que "Cachemira es la región más grande de la sección pakistaní y cada éxito para los marxistas no significa sacar pecho sino que representa un desafío. El mayor de los éxitos será el mayor de los desafíos". Señaló que frente a todos los inconvenientes y a unas condiciones muy difíciles, aún así habíamos avanzado, principalmente debido a las ideas y métodos desarrollados por nuestra corriente internacional. Nos presentamos con las ideas del internacionalismo marxista frente al nacionalismo reinante y las tendencias del fundamentalismo islámico. Este congreso demuestra que hemos derrotado a estas ideas obsoletas. Ninguna otra fuerza política en Cachemira hoy puede celebrar un congreso de este tamaño, ni con su nivel político y organizativo.
Después se dio un informe organizativo detallado
a cargo del compañero Haleem Sajid, dirigente de los trabajadores
postales de Cachemira. Según el informe la organización en Cachemira
trabajaba en cinco zonas, tenía 62 grupos, 9 locales y 32 compañeras.
Presentó una propuesta de 21 compañeros para formar el Comité Regional
de Cachemira que fue aprobada por unanimidad.
Los compañeros Adil Khan y Yasir Irshad intervinieron en la discusión e insistieron en la necesidad de acelerar el crecimiento, que estaba además relacionado con la cuestión de la formación de cuadros, y con la construcción de una base sólida para las fuerzas revolucionarias que puedan hacer llegar el mensaje de la revolución socialista a todo el subcontinente.
Después siguió una intervención sobre las finanzas a cargo de Raja Ijaz, que recientemente fue elegido líder de la Poonch District Bar Association (asociación de abogados del distrito). En la colecta se recogieron 7.000 rupias (1.000 dólares), una enorme suma para la terrible pobreza de la región cachemira. Tras la reunión, los gastos del congreso, 10.000 rupias, se enviaron al centro nacional.
Al final el compañero Lal Khan clausuró el congreso. Insistió en que la organización cachemira está alcanzando una masa crítica y que eso supondrá un tremendo impulso para la construcción de las fuerzas del marxismo revolucionario en toda la región. Señaló que este congreso suponía un punto de inflexión no sólo para Cachemira, sino para toda la región. Destacó que era una inspiración para los compañeros de todo Pakistán y para los marxistas más allá del subcontinente.
Lal Khan respondió a las preguntas y explicó las tareas que se
avecinan. Dijo que ahora no es el momento de mirar atrás, debemos
avanzar. Es cuestión de vida y muerte desde el punto del futuro a largo
plazo de la civilización humana. Insistió en que después de la caída
del Muro de Berlín, los compañeros de Cachemira han demostrado que se
puede construir una base de masas para el marxismo. "Estamos llegando a
un punto de ruptura histórico y estamos casi allí. ¡Adelante! En
nuestra vida podemos conseguir una victoria socialista. No debemos
dejar esa tarea para las futuras generaciones. Debemos resistir los
sufrimientos y derrocar este sistema capitalista podrido, la causa de
toda la miseria y devastación. Ninguna fuerza sobre el planeta podrá detenernos. ¡Adelante!"
Después de la intervención de Lal Khan hubo una estruendosa ovación que duró cinco minutos. Después las compañeras presentes en la reunión subieron al estrado y el congreso terminó con el canto de La Internacional.
Después del congreso se organizó un mitin al que se unió gente de la ciudad y que se convirtió en una gran manifestación de protesta contra el paro, la subida de precios y la pobreza. Había banderas rojas y pancartas. Los que participaron corearon consignas como: "¡Viva la revolución socialista!" "¡No a la guerra nacional! ¡No a la guerra religiosa! ¡ Sí a la guerra de clase!" "¡Revolución! ¡Revolución! ¡Revolución socialista!" El eco de estas consignas resonó mucho más allá del Himalaya.
Source: El Militante